VIEJOS OFICIOS
RELACIONADOS CON LA FERIA DE SAN MIGUEL
DE LANDETE
Mariano López Marín
Los días 26 al 28 de septiembre de 2014 Landete
se volverá a vestir de fiesta para celebrar la
décima edición de su recuperada
Feria de San Miguel. Hay que estar de enhorabuena porque el gran trabajo realizado durante esta década ha dado sus frutos y de nuevo vimos
un ir y devenir de gentes en Landete
recorriendo sus calles y participando activamente en los actos
programados. El alma de esta
Feria es la ASOCIACIÓN DEPORTIVO CULTURAL SAN MIGUEL que es la
organizadora de los actos junto
con la colaboración del Excmo.
Ayuntamiento de Landete, el patrocinio de la
Consejería de Cultura de la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha y
la colaboración de muchos patrocinadores de la
localidad y de la Asociación de Mujeres. El trabajo de todos es importante
Durante estos días de feria a finales de septiembre, y en vísperas de la fiesta de
San Miguel vamos a asistir a todo tipo de actos religiosos, gastronómicos,
deportivos y lúdicos para rememorar esa antigua feria de San Miguel que
tanta fama le dio a Landete. Y todo alrededor del ganado equino, de la
gastronomía local y de la artesanía de
esta comarca. Demostraciones de tiro y arrastre, de arrastre de troncos a la
antigua usanza, demostraciones de cortes de troncos y de artesanía de madera realizada con moto
sierra ,espectáculo ecuestre “como bailan los caballos andaluces”, espectáculos
musicales, actividades para niños como castillos hinchables, encierro infantil
y juegos de globoflexia y otros y un
encierro campero de la mano del ganadero Juan Vicente Mora realizado en las
proximidades del pueblo hasta el recinto ferial situado junto al paraje del Calvario Se
completa este elenco de actos con un mercado medieval donde podremos encontrar
productos tradicionales como cerámica ,
guarnicionería, los diversos
puestos de turrón, churros, venta
de miel, mimbre y variadas artesanías . Por las noches las típicas verbenas con discomóvil y orquesta. La cultura y la tradición unidas en un fin de
semana en la Feria de San Miguel de
Landete.
Gracias a cuantos han
colaborado durante estos diez años para que esta FERIA DE SAN MIGUEL
vuelva a ser posible y concentre como antaño a gentes de la Serranía Baja
de Cuenca y de las comarcas próximas del Rincón de Ademuz , Plana de Utiel-Requena
y zonas próximas de Teruel. Hay que conservar y recuperar nuestras
tradiciones de siglos. Todas ellas sirvieron para convivir gentes de comarcas
próximas y son cultura ancestral de nuestras tierras moyanas que debemos
impulsar. Todo el esfuerzo que hagamos por mantenerlas e impulsarlas ayudará a
la dinamización económica, turística y cultural de estas tierras de
frontera entre Teruel, Cuenca y Valencia.
Y que mejor momento para recordar oficios
que tenían relación con esta
afamada feria y que estaban presentes
en ella los días grandes de San Miguel en
otras épocas del siglo XIX y parte del XX hasta que la feria dejó de existir porque
el campo se mecanizó , desaparecieron casi todas las caballería y hubo mucha
emigración en estas tierras Eran oficios muy ligados a la vida de la época y con los que la gente ganaba un dinero como complemento de los
pocos recursos que daba el campo.
Día de campo en paraje " Regajo Ciriyuelos " de Salvacañete a principios de los años 1960. Familias Yuste y Abril Carros, caballerías y bicicletas para desplazarse. Foto gentileza de mi amigo Miguel Abril Alcalá.Muchas gracias.
Caldereros: Vendían
calderas de todo tipo, de hierro, de
cobre, sartenes, paellas, gavetas de zinc, etc. Todo era necesario para cocinar, para hacer los embutidos en las matanzas,
para lavar ropa. Un tratante afamado de
Landete, Jesús “El Calderero “estaba relacionado con esta profesión. Se
aprovechaban los días de feria para
reponer esos objetos tan necesarios. Junto a la casa de
las Palacinas, familia muy importante de
la localidad, se instalaba cada feria el puesto de los caldereros.
Antigua feria de Cedrillas( Teruel ) donde iba mucha gente de la Serranía Baja de Cuenca a vender carneros. foto tomada de laweb: . http://www.cedrillas.es/laferia.htm
Muchas gracias
Tratantes: Comerciaban
con animales de labor: burros, muletos y muletas, machos y
mulas, caballos y yeguas. Recorrían toda la
comarca y eran muy conocidos. En
la feria aparecían con sus reatas de
muletos y muletas bien limpios y
cuidados, con machos y mulas, con caballos
y yeguas, con burros y burras Los
exponían en el ferial, desde la Fuente de los Cantones hasta el Calvario. Las gentes de la comarca y de las
comarcas próximas del Rincón de Ademuz y
zona de Utiel y Requena se
acercaban hasta Landete para comprar
algún animal o vender alguno.
Eran tratantes afamados de caballerías. Pepe Camañas de Ademuz y casado en
Landete, Pepe conocido como “Peteque”
también casado en Landete, Evaristo el de Vallanca y sus hijos uno de los
cuales Julio vive en Landete, Jesús el Calderero de Landete, Mariano Valero, “Mariano Lino” y su hijo
Amalio Valero de Salvacañete y con residencia en Talavera de la Reina pero que
pasaban largas temporadas por nuestra zona, Félix Pastor de Salvacañete
dedicado a las lides de tratante de caballerías durante años y vecino mío. De Utiel también llegaban famosos tratantes a la feria de
Landete y los de esta comarca iban con frecuencia a Utiel, alojándose en sus numerosas posadas,
entre ellas la de San José, donde está actualmente Mercadona, y en la de la
Rambla que acogía a gentes de Landete, Talayuelas y Sinarcas. Era
costumbre criar con las yeguas o con
las burras y esas crías se llevaban
a vender a Landete. Después de cada venta el “alboroque “. En alguna
taberna próxima como la de Paco Maenza, en la Plaza de Abajo, el que había
vendido la caballería o el propio tratante invitaba a los que habían
participado en la venta. Se miraban
muchos detallas de cada animal como su dentadura para saber la edad, su altura
y su fuerza y por supuesto que tuviese buena presencia. Machos romos[1] o
yeguatos según para qué faena se
utilizasen. Los
carreteros y los arrastradores los exigían fuertes. Landete y toda
esta comarca tenían carreteros y arrastradores de maderas afamados que precisaban
buenas caballerías. El tío Octavio[2] de
Landete fue uno de esos arrastradores
muy conocidos y quizá el último que ejerció esta profesión en Landete
utilizando caballerías. Pasaba semanas
enteras en el lugar del trabajo,
donde estaba la corta. Sólo acudía a
casa a recoger el suministro para unos cuantos días. Los carreteros de
la parte de Salvacañete, Alcalá de la Vega y Algarra tenían paso obligado por Landete en dirección a las serrerías y estación de Utiel.
Escenas de trilla en Alcalá de la Vega y en Landete.La foto inferior es de Francisco Navarro Pérez., Muchas gracias
Repoducción de una escena de trilla" Recogiendo la parva al estilo tradicional"- foto tomada del blog www.osmonegros.blogia .com.Muchas gracias |
Todas las faenas del campo
necesitaban de la fuerza motriz de las caballerías.
Para arar la tierra, para acarrear
las mieses, los productos de la
huerta o la leña, para trillar, tirar del carro, arrastrar troncos en el campo cuando se cortaban árboles o
transportar madera. Cuanto mejor fuesen
las caballerías más fuerza tenían. Un buen tratante buscaba siempre las mejores caballerías para que desempeñasen bien su labor y pudiesen
venderse bien. Cuando llegaban los tratantes de caballerías a los pueblos se
alojaban en sus posadas y eran días de movimiento de dinero para pagar a los
posaderos, herrar algunas caballerías y pagar o cobrar por las compras y las
ventas. En Salvacañete se alojaban en la posada del tio Valeriano, junto a la
plaza del pueblo y en la del Tio “Juan de la Posá “entre la calle La Virgen y
La Calle Cementerio
Guarnicioneros o correcheres:
Vendían cabezadas, cinchas, correajes
para las caballerías, colleras de cuero
y muchos atalajes que eran
necesarios para trabajar con las
caballerías. Estaban siempre presentes en todas las ferias , en Landete
para San Miguel por supuesto, en Ademuz en su feria de San José o para todos los Santos , el
día 8 de septiembre en Garaballa en la fiesta de la Virgen de Tejeda, en
Moya en septiembre para los septenarios..
Aprovechaban los labradores para comprar
estos atalajes en la feria. Cuando llevaban
sus caballerías a vender iban con sus mejores cabezadas. Los labradores
acomodados solían distinguir sus caballerías
por llevar cabezadas marcadas con sus
iniciales y los correajes y colleras
eran especiales. Los
guarnicioneros elaboraban cabezadas, colleras,
correajes, morrales o zurrones para los
pastores y muchos enseres que eran necesarios para la vida en
el campo y el trabajo con las caballerías. No faltaban en sus puestos los bastones, los garrotes hechos
con madera de llatón[3], las
horcas para aventar y un sinfín de productos necesarios en la vida agrícola y
ganadera de la época.
Fotografía de Maria José Latorre en la web :www.visitaporel moncayo.com.Muchas gracias
Fotografía de David Redal Vela en la web :www.visitaporel moncayo.com.Muchas gracias
Imagen tomada de la web : www. el ciegohistórico. wordpress.com sobre la guarnicionería en El Ciego (Álava). Muchas gracias.
Esquiladores de caballerías: No podían
faltar estos profesionales que con sus tijeras y sus máquinas dejaban a los animales muy lustrosos. Había
auténticos especialistas que hacían
dibujos especiales en el pelo del animal cuando lo cortaban, En Salvacañete
destacaba el tío Telesforo Yuste, un verdadero maestro en el arte de esquilar caballerías.
Daba gusto ver sus dibujos. En Landete fue un gran esquilador el tio “Chicuto”
que tenía su lugar de esquileo junto a la Fuente de los Cantones, donde está
actualmente la Droguería de Ángeles.
Esquilando las ovejas:imagen tomada de las web www.semanasantaymas.blogspot.com :www.ojodigital .com. Muchas gracias.
Esquiladores de ovejas. La oveja es animal muy unido al mundo rural. Cada año, en plena primavera cuando los calores apretaban, estos profesionales de desplazaban de casa en casa para esquilar los rebaños. Primero se realizaba esta labor con tijera de mano, posteriormente con “manojas”[4] accionadas por una máquina con manillero y después ya con energía eléctrica. La lana era un producto muy apreciado que se utilizaba para hacer colchones y prendas de vestir: calcetines, jerséis, chaquetas, etc. Había que elaborarla y de ello se encargaban las fábricas de lana, previo lavado y los telares. Landete tuvo fábrica de lana propiedad de la familia Mínguez, situada junto al río Ojos de Moya y el puente que da acceso al pueblo desde Ademuz y Utiel. En Salvacañete y zonas próximas llevaban la lana a l fábrica de Tramacastilla[5] transportada en caballerías y se bajaban la lana limpia y mantas de pastor. En la feria de San Miguel de 2006 y en otras hizo demostraciones de esquileo de ovejas Fabio Acebrón.
Herreros: Para que
las caballerías caminaran bien debían ir
bien herradas. Estos profesionales se encargaban de ello. En los días previos a la feria o cuando llegaban
tratantes a los pueblos aumentaban su faena. El dueño del animal le sujetaba el vaso[6] o
parte dura de la pata y el herrero iba
quitando parte de él alisándolo para
después con clavos colocar las
herraduras que él mismo había hecho en el fuego de su fragua. A
veces no se estaban quietas las caballerías
y había que ponerle el “acial “en
la boca. La mayoría de las veces
cobraban en especie, con trigo. Los herreros además abuzaban rejas de arados, arreglaban los
aperos agrícolas y hacían rejas para las
ventanas. Todavía quedan en muchos de
nuestros pueblos artísticas rejas hechas
sin ningún tipo de clavos y
que hicieren famosa la rejería de Cuenca
y de muchos lugares de la provincia La
familia Ramírez, Aureliano y Juan y Baldomero
García fueron famosos herradores
en Landete. El tío Baldomero y su hijo Delfín tenían la herrería cerca del
puente del río. La familia Muñoz, Julio y su hermano, fueron famosos herreros que luego tuvieron taller de
carros.
Imágenes tomadas de las web: www.tallerdebelenismo.fotocreacion.com y www.todocoleccion.net.La imagen de la derecha reproduce un cromo antiguo dedicado a los herreros.
Albarderos: Estos profesionales
construían las albardas para poder cargar
a las caballerías. Utilizaban maderas,
pieles, telas duras (lona) y paja o lana
para rellenar las partes blandas. Las albardas se sujetaban a la
caballería con la ““cincha “y con la “tarre”, correas que pasaban por
detrás del rabo de la caballería. Una
buena albarda era fundamental para poder llevar las cargas bien
en “ serones “, en “ amugues”
o palos de acarrear , en “ aguaderas “ como ocurría con los
cántaros de agua o simplemente entercianda
la carga, como se hacía con la leña En la feria de Landete también, vendían
albardas, serones , aguaderas, baleos,
,esteras, etc. fabricados por artesanos locales y de la comarca. Algunos vecinos
del pueblo de Vallanca en el Rincón de Ademuz
fabricaban serones, aguaderas, esteras, etc. y las vendían tanto en la
feria de Ademuz como en la de Landete y en las fiestas importantes de los
pueblos de las comarcas próximas.
Aperadores.
Fabricaban pequeñas herramientas y utensilios necesarios para la vida agrícola
y el trabajo del campo desde arados y rejas para ellos hasta máquinas para
moler remolacha, resegadores de forrajes
y multitud de pequeños utensilios como trébedes para sartenes y
calderas. En Landete se dedicaban a esta actividad la familia de “los Matas”
con taller en las proximidades del
puente del río Ojos de Moya muy cerca de la farmacia de D. Luís López. Cuando el campo se fue mecanizando y llegó la
emigración esta actividad cesó.
Posaderos: Cuando llegaban los tratantes a la feria de Landete o a cualquiera de
nuestros pueblos se alojaban en las
posadas donde las caballerías
encontraban cuadra y pienso y las personas un buen alojamiento y un excelente llantar
con los productos que había entonces.
Buenos embutidos y excelentes guisos caseros
acompañados del vino de la tierra, del pan elaborado en hornos comunales o caseros y de las frutas que daba el tiempo.
Las posadas,
tanto en Landete como en todos los
pueblos de la comarca se situaban en las
plazas o cerca de ellas En
Landete en la plaza de Abajo, a la derecha estaba el Café de Maenza y la
Posada de Abajo, regentada por el Sr. Alfredo. En la plaza de arriba, al
lado de la iglesia estaba la Posada de Arriba, regentada por Antonio y Luisa Estos tres lugares y otros cafés eran centros
de convivencia en los años esplendorosos
de la FERIA DE SAN MIGUEL. Muy cerca de
la plaza de Abajo estaban las
cuadras de caballerías de Pepe Camañas,
tratante conocido en toda esta comarca. Los que se alojaban en las posadas y traían caballerías pagaban un tanto por el derecho de estaca
en el que se incluía el pienso y la paja
de las caballerías. Las posadas también servían de alojamiento para los
arrieros y carreteros.
Taberneros: Estos días de la feria de San Miguel los cafés y tabernas
de Landete bullían con
las gentes que llegaban de todos
los lugares. En estos lugares se
cerraban tratos y se celebraban alboroques. La figura del tabernero
o del dueño del café era
importante animando a los
clientes, dando un trato agradable y siendo comedido en sus palabras. ¡Cuantos tratos y cuantos
alboroques se habrán cerrado y celebrado
en los viejos cafés de Landete
como el de Paco Maenza en la
plaza de Abajo, los de
Mariano y Guillermo junto a la carretera y el de la familia de Sara y Fernando amén de otros.
Tarde de toros en Landete en los años 1960 en su sus fiestas grandes de San Roque con carros en la plaza de D. Nicanor Grande , Plaza de Abajo o Plaza del Ayuntamiento. En ella a su derecha estaba el Café de Maenza y la Posada de Abajo , regentada por Antonio y Luisa.
Quincalleros: Vendían todo tipo de cosas
desde tejidos a imperdibles, regalos,
baratijas, cremalleras, espejos, botones, objetos del hogar, etc. No faltaba su presencia en
ninguna Feria de San Miguel a la que acudían gentes de toda la comarca. Las
ventas eran importantes y raro era el que acudía a la feria que no se llevase alguna quincalla
como regalo pata su familia. Había
en algunos pueblos familias
dedicadas a esta actividad
y eran conocidos como “ Los
quincalleros” . En Salvacañete había una familia que se dedicaban a esto.
Fabricantes de carros o
carroceros: Esta actividad dio mucha fama
a Landete en años que los carros eran muy importantes para
transportar maderas, productos para las tiendas comarcales, el vino, los forrajes,
las harinas o los cereales. Esos
carros se exhibían también en la feria como una forma de vender. Carros de varas o de “chirríón”, de pértigo y madereros. Estos últimos llevaban en los laterales unos hierros paras
sujetar los troncos. Cuando bajaban con madera a Utiel a la
vuelta se subían aceite, bacalao
salado, cubas de sardinas, arroz, azúcar y otros productos de los comercios
utielanos .Incluso a veces a pasajeros.
En la subida a Casillas de Ranera, por la antigua carretera, debían enganchar más pares de caballerías para formar una
buena reata y duplicar o triplicar el esfuerzo. Durante el camino había varios lugares de parada obligada junto a Pie Mulo en Talayuelas, en Casillas de Ranera y
Sinarcas y en las proximidades de Utiel.
Los talleres de carros del tío Julio Muñoz y los de los Ramírez, ambos en
Landete, eran famosos en toda la comarca y recibían numerosos encargos.
Partes de los atalajes de una caballería enganchada a un carro.Imagen tomada de la web :www.fanyanas.com
Partes de un carro de varas o de chirrión. Imagen tomada de la web : www.rokyllo1.blospot.com. Muchas Gracias
Charlatanes: Vendían de todo pero se fueron especializando en mantas procedentes de Onteniente. Animaban a la gente a comprar dándole numerosos regalos: toallas, sábanas, bolígrafos, etc.
Turroneros: En la Feria de San Miguel nunca faltaban. Los productos los fabricaban ellos: chupones,
turrón de guirlache, alajú, turrón blando, etc. La imagen de la tía África
Magro con su puesto de turrón es algo
que no olvidan los landeteros no sólo en la feria de San Miguel si no también en las numerosas fiestas a lo largo del año, para la
Virgen de la FuenMaría y para San Roque.
Llegaban también los turroneros de Ademuz y de Vallanca con gran fama en la elaboración de este producto: Las familias,
Tomás, Pitoches, Adalices o Millanes
pasaron más de una vez por Landete y su
Feria de San Miguel con sus arquillas de turrón que transportaban en caballerías de un lugar
a otro.
Churreros: El puesto de
churros que ponía la tía Isabel, madre de Ignacio Aragonés, junto a
la Fuente de los Cantones era muy
visitado por todos. Hacía unos
churros que sabían a gloria Era un reclamo más y una vieja estampa de esa
antigua feria de San Miguel a la que acudían gentes de
toda la comarca.
Fabricantes de patatas
fritas: entonces no vendían patatas
fritas en bolsas. A la feria siempre llegaban
esas personas que las elaboraban
al instante. Un paquete de
patatas recién fritas hacía las delicias de la chiquillería y de los mayores. El olor de los churros
y de las patatas recién hechas inundaba
el ferial en días de San Miguel.
Hasta aquí mi colaboración a los
actos de esta 10ª edición de la Feria de San Miguel de Landete. Hay que difundir todo lo nuestro, esa cultura ancestral
heredada de padres a hijos y con raíces en
tiempos medievales. Se valora lo que se
conoce. Los tres artículos que he dedicado a la Feria de San Miguel de Landete tienen
ese objetivo, difundir nuestra cultura de estas antiguas Tierras de Moya,
resaltar la convivencia entre pueblos de
la misma zona y valorar el esfuerzo de gentes, de antes y de ahora, que han
hecho posible que esta recuperada feria de San Miguel de Landete se
siga celebrando. Quiero agradecer el
trabajo desinteresado de todos los colaboradores que han hecho posible un año más que esta feria se celebre y animarles a seguir en la
brecha para poder celebrar la siguiente
edición. Van a llenar, un año más, las
calles de Landete de cultura y tradición y porque no de
homenaje a todas las
personas de Landete y su comarca y de otros lugares próximos que
hicieron posible que esta feria afamada
se celebrase muchos años. Cuando el 30 de septiembre de 2006 se celebró el homenaje a D. Félix Hinarejos Moragón en el centro cultural de
Landete allí se homenajeó también a
quienes hicieron posible que
esta feria de San Miguel
existiese durante muchos años y
Landete fuese por unos días el
centro económico, cultural y de convivencia de
la Serranía Baja de Cuenca y de
otras comarcas próximas de Teruel,
Valencia y Cuenca.
Hago una
propuesta para la próxima edición de
esta Feria de San Miguel incluir
homenajes a personas que quedan todavía y que fueron profesionales de alguna
actividad relacionada con ella , realizar exposiciones de fotos, libros y otros materiales relacionados
con la cultura de esta zona , catas de productos tradicionales y alguna
demostración más de trabajos artesanos.
¡Que pasemos
unos excelentes día de la Feria de San Miguel
con la convivencia y la armonía que la caracteriza!
Vuestro amigo
Mariano López Marín.
Utiel. San Miguel 2014.
[1] El muleto romo era la cría de burra que se
había cruzado con un caballo y el muleto
yeguato la cría de yegua cruzada con un burro. Eran muy apreciados los
muletos romos por su extraordinaria fuerza para el trabajo. Eran muchos los
labradores que criaban sus propias caballerías para obtener unos ingresos
extras o tener fuerza motriz para el trabajo. En varios lugares de la comarca
había “paradas de la remonta” con sementales, caballos y burros” para “cubrir
a las hembras”. Cuando iban a la
parada se decía “me voy a echar la….
(yegua o burra) a Ademuz o Landete”
En Salvacañete tuvo “parada” el Tío Timoteo Barrera. En Landete y Ademuz había “paradas
de remonta” oficiales dependientes del ejercito con un brigada y un par de
soldados al frente de ellas. Los de Salvacañete utilizaban las dos, yendo
siempre a la que “mejor pintaban los sementales” es decir a la que tenía mejores sementales y las crías eran más
fuertes y con mejor presencia. LOPEZ MARÍN, MARIANO” Etnología y costumbres populares de
Salvacañete” Inédito.
[2]
Tuve la ocasión de hablar con el de este tema en
varias ocasiones.
[3] Estas horcas procedían de la zona de Cortes de Pallás
y Jarafuel donde se crían llatoneros o lidoneros dedicados expresamente para hacer horcas. En
los antiguas pajares de nuestros pueblos y
en museos etnológicos particulares se pueden ver muchas de estas horcas.
En Landete tiene una excelente colección
de objetos antiguos y herramientas del
mundo rural Isidro, el hijo de Morales.
[4] La manoja es una tijera mecánica con peines que se
mueve por la energía suministrada por un
mecanismo o por energía eléctrica. Mi padre
fue esquilador durante más de cuarenta años y utilizó tijera, máquina de manilla y manoja eléctrica.
[5] LOPEZ MARÍN .M .-· “Tiempo de Trashumancia” Ediciones Rodeno .Cullera 2012
[6]
LOPEZ MARÍN, M.-“Etnología y costumbres populares de Salvacañete” Inédito. Algunos
artículos están publicados en el blog del autor http://mariano-recuerdosyaoranzas.blogspot.com.es/
LIBROS DE MARIANO LOPEZ MARÍN CON TEMAS HISTÓRICOS Y ETNOLÓGICOS
OTROS ARTÍCULOS SOBRE LA FERIA DE SAN MIGUEL EN ESTE MISMO BLOG.
Clicar en el enlace y os llevará hasta el artículo,
DÉCIMO ANIVERSARIO DE LA FERIA DE SAN MIGUEL DE LANDETE
CURIOSIDADES HISTÓRICAS Y ETNOLÓGICAS DE LA DEVOCIÓN A SAN MIGUEL EN SLAVACAÑETE YEN LAS ANTIGUAS TIERRAS DE MOYA
LIBROS DE MARIANO LOPEZ MARÍN CON TEMAS HISTÓRICOS Y ETNOLÓGICOS
OTROS ARTÍCULOS SOBRE LA FERIA DE SAN MIGUEL EN ESTE MISMO BLOG.
Clicar en el enlace y os llevará hasta el artículo,
DÉCIMO ANIVERSARIO DE LA FERIA DE SAN MIGUEL DE LANDETE
CURIOSIDADES HISTÓRICAS Y ETNOLÓGICAS DE LA DEVOCIÓN A SAN MIGUEL EN SLAVACAÑETE YEN LAS ANTIGUAS TIERRAS DE MOYA