Estamos en el comienzo de las fiestas navideñas.Mañana por la noche es noche de Nochebuena. Las familias compartirán mesa y mantel y cada uno según sus posibilidades tendrá un tipo u otro de alimentos pero lo que no se perderá ese carácter familiar de esta celebración.Es tiempo de añoranzas y de recuerdos, de familiares que ya no están con nosotros,de otros que están lejos y de recuerdos de infancia de esas celebraciones navideñas entrañables que hoy os traigo a este blog.
Recuerdo cuando mi madre y todas las mujeres de Salvacañete y sus aldeas preparaban las vísperas de Navidad los famosos " melaos", dulces navideños hechos con miel y otros productos de la tierra:nueces,almendras,huevos,harina.En una sociedad rural de autoconsumo todo se elaboraba en casa.Mi hermana y yo ayudábamos a partir nueces para después con miel hacer turrón de guirlache . Mi madre calentaba la miel y cuando estaba a punto de caramelo la mezclaba con las nueces y extendía la pasta sobre una pequeña mesa de madera, un " escañeta", que todavía conservamos dejando la mezcla totalmente plana. Se dejaba enfriar en un lugar fresco,normal la cámara y luego una vez frío se partía en trocitos con un cuchillo o con la mano. Era un turrón delicioso que consumiamos en las fiestas navideñas , especialmente en Nochebuena y Navidad. También hacia mi madre frutilla en sartén con una mezcla de huevos, harina y gaseosa de papelitos para que subiese la masa.Esa masa no muy espesa se freía a trocitos en una sartén . Esos trocitos ya fritos se mezclaban con miel a punto de caramelo y se extendiendo la pasta sobre una mes , dejándola enfriar.Era un dulce extraordinario.Algunas veces también hizo nuestra madre mazapán utilizando frutas para darle más sabor.
En las vísperas de Nochebuena ,unos días antes los que eramos monaguillos en la iglesia e incluso años después siendo jóvenes colaborábamos haciendo el belén de nuestra parroquia de Salvacañete , situándolo siempre ,por su amplitud ,a la izquierda del altar principal.Traíamos tobas, musgo y pequeñas ramitas cogidas en los alrededores del pueblo para ambientarlo adecuadamente y procurábamos cada año introducirle alguna novedad artística. Era un trabajo colectivo de varias personas en el que colaboraban otras mas mayores. El dia de Nochebuena, a las 12 de la noche, misa del gallo a la que asistía mucha gente .Las familias se juntaban después de la misa a celebrar la Navidad con esos melaos elaborados previamente. . Los chicos y chicas pedíamos el" aguilando" el día de Navidad por la mañana y por la tarde los jóvenes iban de casa en casa pidiendo el " aguilando" con instrumentos musicales: zambombas, laudes ,guitarras,almireces, platillos,botellas de anís y algún acordeón..La gente les daba lo que tenía :patatas,nueces, turrón, algún trozo de embutido de la matanza, manzanas,etc.Con todo lo recogido se hacía una comida posteriormente .Ese día de Navidad las madrinas de bautizo regalaban a sus ahijadas una " coronilla", un pan sobado o rollo con picos como símbolo de su aprecio.Recuerdo todavía cuando mi madre se lo daba a dos ahijadas suyas que la recuerdan en la actualidad con mucho cariño.
De mi último libro publicado y presentado el 13-8-2016 en Salvacañete ETNOLOGÍA Y COSTUMBRES POPULARES DE SALVACAÑETE .Ediciones Rodeno y colaboración Excmo . Ayuntamiento de Salvacañete, Cullera 2016 reproduzco , con alguna aportación nueva , como se celebraba la Navidad en Salvacañete y sus aldeas y en los pueblos que formaron el antiguo Marquesado de Moya en los años 1930 hasta 1980 y anteriormente. .Quiero rendir homenaje en primer lugar a mi madre Bienvenida Marín Marín fallecida el 9-11-2016, a las gentes de nuestro pueblo y sus aldeas que han sido capaces de conservar una cultura ancestral transmitida de generación en generación.Recuerdo cuando recogía estas tradiciones hacia mediados de los años 1970 la alegría que experimentaban los más mayores cuando los entrevistaba . A mi memoria vienen los nombres del tío Mariano Yuste "Mariano Calonge" y sus hijas cantándome los"aguilandos"y los villancicos de Salvacañete al amor de la lumbre de su casa de Santa Ana, la de la tía Visitación Rodilla que me enseñó montones de canciones populares y de coplas de nuestro folclore, la tía Tomasa Martínez,esposa del tío Antonio Lozano que me cantaba seguidillas y jotas, la tía Balbina Valero madre de nuestro paisano y excelente escritor Aurelio Yuste Valero, Dario Marín " El Cartero de Casas Nuevas" entonando canciones tradicionales de Salvacañete, mis padres Bienvenida Marín Marín y Mariano López Marín que han sabido transmitirme los saberes tradicionales de Salvacañete y sus aldeas , el tío Miguel Sánchez"Miguel el Caracolas" barbero y peluquero de nuestro pueblo que me enseñó canciones con flauta tradicional, mi abuela Juliana Marín Martínez y su prima Dionisia Martínez que me explicaron como se bailaban las seguidillas y que canciones se cantaban.
Todas estas canciones están recogidas en este libro mencionado y en FOLCLORE DE SALVACAÑETE. Además tengo un CD con las grabaciones originales que recogí en la década de 1970 y que forma parte del archivo sonoro del Folclorista y Cronista Oficial de Requena , mi amigo Fermín Pardo a quien se lo facilité. Este archivo fue donado al Archivo Histórico de Requena y en su web se puede consultar.
En las vísperas de Nochebuena ,unos días antes los que eramos monaguillos en la iglesia e incluso años después siendo jóvenes colaborábamos haciendo el belén de nuestra parroquia de Salvacañete , situándolo siempre ,por su amplitud ,a la izquierda del altar principal.Traíamos tobas, musgo y pequeñas ramitas cogidas en los alrededores del pueblo para ambientarlo adecuadamente y procurábamos cada año introducirle alguna novedad artística. Era un trabajo colectivo de varias personas en el que colaboraban otras mas mayores. El dia de Nochebuena, a las 12 de la noche, misa del gallo a la que asistía mucha gente .Las familias se juntaban después de la misa a celebrar la Navidad con esos melaos elaborados previamente. . Los chicos y chicas pedíamos el" aguilando" el día de Navidad por la mañana y por la tarde los jóvenes iban de casa en casa pidiendo el " aguilando" con instrumentos musicales: zambombas, laudes ,guitarras,almireces, platillos,botellas de anís y algún acordeón..La gente les daba lo que tenía :patatas,nueces, turrón, algún trozo de embutido de la matanza, manzanas,etc.Con todo lo recogido se hacía una comida posteriormente .Ese día de Navidad las madrinas de bautizo regalaban a sus ahijadas una " coronilla", un pan sobado o rollo con picos como símbolo de su aprecio.Recuerdo todavía cuando mi madre se lo daba a dos ahijadas suyas que la recuerdan en la actualidad con mucho cariño.
De mi último libro publicado y presentado el 13-8-2016 en Salvacañete ETNOLOGÍA Y COSTUMBRES POPULARES DE SALVACAÑETE .Ediciones Rodeno y colaboración Excmo . Ayuntamiento de Salvacañete, Cullera 2016 reproduzco , con alguna aportación nueva , como se celebraba la Navidad en Salvacañete y sus aldeas y en los pueblos que formaron el antiguo Marquesado de Moya en los años 1930 hasta 1980 y anteriormente. .Quiero rendir homenaje en primer lugar a mi madre Bienvenida Marín Marín fallecida el 9-11-2016, a las gentes de nuestro pueblo y sus aldeas que han sido capaces de conservar una cultura ancestral transmitida de generación en generación.Recuerdo cuando recogía estas tradiciones hacia mediados de los años 1970 la alegría que experimentaban los más mayores cuando los entrevistaba . A mi memoria vienen los nombres del tío Mariano Yuste "Mariano Calonge" y sus hijas cantándome los"aguilandos"y los villancicos de Salvacañete al amor de la lumbre de su casa de Santa Ana, la de la tía Visitación Rodilla que me enseñó montones de canciones populares y de coplas de nuestro folclore, la tía Tomasa Martínez,esposa del tío Antonio Lozano que me cantaba seguidillas y jotas, la tía Balbina Valero madre de nuestro paisano y excelente escritor Aurelio Yuste Valero, Dario Marín " El Cartero de Casas Nuevas" entonando canciones tradicionales de Salvacañete, mis padres Bienvenida Marín Marín y Mariano López Marín que han sabido transmitirme los saberes tradicionales de Salvacañete y sus aldeas , el tío Miguel Sánchez"Miguel el Caracolas" barbero y peluquero de nuestro pueblo que me enseñó canciones con flauta tradicional, mi abuela Juliana Marín Martínez y su prima Dionisia Martínez que me explicaron como se bailaban las seguidillas y que canciones se cantaban.
Todas estas canciones están recogidas en este libro mencionado y en FOLCLORE DE SALVACAÑETE. Además tengo un CD con las grabaciones originales que recogí en la década de 1970 y que forma parte del archivo sonoro del Folclorista y Cronista Oficial de Requena , mi amigo Fermín Pardo a quien se lo facilité. Este archivo fue donado al Archivo Histórico de Requena y en su web se puede consultar.
Belén instalado en la iglesia de Salvacañete el año 2013. Foto. Mariano López Marín.
La forma de celebrar la Navidad en Salvacañete y en otros lugares de las antiguas tierras de Moya ha cambiado mucho con el paso de los años. Por suerte en Salvacañete y otros pueblos sigue existiendo ese carácter familiar y todavía se conservan costumbres ancestrales como la de pedir el aguinaldo los chicos y los jóvenes o la de juntarse los familiares y vecinos para celebrar la Navidad, después de la misa del gallo, el día de Nochebuena.
Navidad significaba pedir los “aguilandos”, hacer el belén de la iglesia y las celebraciones religiosas de Nochebuena, Navidad, Nochevieja, año Nuevo y Reyes. Los aguilandos era un presente que se daba en Nochebuena o en Navidad a familiares, vecinos , ahijados y a todos los que llegaban a las puertas de las casas pidiéndolos con alegre música de zambombas, guitarras, laudes, bandurrias, panderetas, botellas de anís o almireces. La gente entregaba como presente del “aguinaldo” patatas, nueces, almendras, castañas, higos secos, turrón casero, frutas, embutidos o en algunos casos dinero. En Salvacañete era particularmente significativo el aguinaldo que daban las “madrinas de bautizo o madrepilas “ a sus ahijados o ahijadas. Les entregaban una “ coronilla” que era un rollo hecho de pan sobado con anisetes en grano y al que se le hacían unos cortes. El nombre de coronilla se le daba porque tenía forma de corona y el significado de ese aguinaldo es que demostraba la preocupación de la madrina de bautizo por su ahijado o ahijada al que consideraba como un rey o una reina y por eso se le regalaba esa coronilla. La palabra aguilando es del castellano antiguo y mi profesor de Lengua y Literatura en 6º de Bachillerato en el Instituto Alfonso VIII de Cuenca nos animaba a conservarla. Gracias D. Vicente por esos sabios consejos.
Los aguinaldos o aguilandos los pedían tanto las personas mayores como los chicos y jóvenes en el pueblo y en sus numerosas aldeas. El día 24 por la noche, Nochebuena, después de la misa del gallo lo pedían los jóvenes, el día 25 por la mañana, antes de la misa de Navidad, los chicos y por la tarde los casados. Con lo que obtenían jóvenes y casados se hacían una comida. Los chicos se repartían los aguinaldos. Se entonaban canciones de pedir los aguinaldos acompañados de instrumentos musicales. Los chicos llevábamos zambombas hechas con la butifarra del cerdo, un bote de tomate y el tronco de la planta del gamón, la gamonita, y panderetas. Los jóvenes y mayores llevaban muchos instrumentos destacando los almireces, las botellas de anís, las guitarras, bandurrias y laudes, los platillos y a veces algún acordeón. Siempre había algún músico local que sabía tocarlo. En Salvacañete tocaba el acordeón y otras veces los platillos en mayos, músicas o en villancicos Feliciano Yuste. En la publicación “ Folclore de Salvacañete”, editado par el ayuntamiento en el año 2000 y en mi último libro "ETNOLOGÍA Y COSTUMBRES POPULARES DE SALVACAÑETE" están recogidos los villancicos, las canciones de pedir el aguinaldo y otras manifestaciones folclóricas de Salvacañete que tuve la suerte de recoger en un cassette en los años 1970 de boca de quienes los cantaban y que incluso todavía conservo en Cdromm. Hago mención especial al tío Mariano Yuste , a su esposa Juana y a sus hijas Adoración ,Milagros y Soledad, a mi madre Bienvenida Marín , a la tía Visita de Casas Muevas, Visitación Rodilla que me informaron ampliamente de las canciones de pedir el aguinaldo y de otros temas folclóricos.
Todos los años venimos
a cantar por este tiempo
la canción del aguilando
y el Santísimo Sacramento.
Cuando se llega a una puerta
se debe de preguntar
si es gusto de los señores
pasaremos a cantar.
Empecemos por el amo
para que no se lo tome a mal
rematemos por el ama
y a todos en general.
En medio de esta cocina
hay una piedra bordada
que la ha bordado.............( NOMBRE)
que es la moza más salada.
En medio de esta cocina
hay un banco enladrillado
donde se sienta ........ (nombre )
y su esposa al otro lado.
Ya se pensaba ese viejo
que yo de él no me acordaba
lo llevo en mi corazón
con letras de oro bordadas.
No sé como no relucen
Los guijarros de esta calle,
Pisándolos quien los pisa
Barriéndolos quien los barre
Así se van nombrando a todos los miembros de la familia cantándoles a cada uno un poco
Alumn@s de párvulos en Salvacañete en los años 1960
También se cantaban estas otras
Hasta esta puerta hemos llegado
con contento y alegría
a pedir el aguilando
Y a decir Ave María.
Ave María
digan todos como yo
viva la recién parida
y el infante que nació.
Válgame el Niño Jesús
los clavos y la corona
los martillos y la cruz.
So nos habéis de dar higos
nos les quitéis los pezones
que aquí traigo un compañero
que se los come a serones.
Para despedirse en cada puerta se utilizaban distintas despedidas.
1
La despedida les doy
la que Cristo echó en Boniches
que no les dejan vivir
ni los piojos ni los chinches.
2
La despedida les doy
por debajo de esta cortina
y les doy las buenas noches
a los que hay en la cocina .
3
La despedía les doy
por debajo de este portal
y los dejo encomendados
a la Virgen del Pilar.
4
La despedida les doy
la que Cristo echó en Belén,
quien nos ha juntado aquí,
nos junte en la Gloria, amén.
A veces se inventaban sobre la marcha otras despedidas pues había personas que tenían gran facilidad para inventarlas.
Canciones de pedir el aguinaldo que cantaban los chicos.
A esta puerta hemos llegado
con contento y alegría
a pedir el aguilando
y a decir Ave María
Ave María purísima
digan todos como yo
viva la recién parida
Y el infante que nació.
Esta puerta es de hierro
y aquí vive un caballero
y aquí vive y vivirá
y aguilandos nos dará .
Esta última estrofa se presta a muchos matices y cambiándole el primero y el segundo versos se puede adaptar a muchas profesiones (carpintero, panadero, labrador, ganadero, etc.)
Tenemos la suerte en Salvacañete de que la Rondalla Virgen de Valdeoña, impulsada por mi buena amiga Mª Eugenia Sáez Gallego, sigue manteniendo vivo este folclore de Navidad y el del resto del año. Todavía siguen saliendo la tarde del 25 de diciembre a “pedir los aguilandos “ o aguinaldos”.
Distintos objetos utilizados como instrumentos para cantar los" aguilandos o aguinaldos"
Las zambombas nos las fabricábamos nosotros con el estomago del cerdo,la butifarra , que se trabajaba con ceniza fría para dejarla limpia de grasa.Se colocaba en un bote de conserva y se ataba alrededor fuertemente con hilo de bramante y se le ponía un palo de gamón (gamonita ) ya seco para poder tocarla.
DULCES CASEROS PROPIOS DE LA NAVIDAD
Quiero hacer mención también a los dulces típicos navideños que se hacían en “melaos”, porque están y estaban echas con miel obtenida de las colmenas que había por esta zona, cuando abundaban los colmeneros. Estos melaos se preparaban y se siguen preparando la tarde del 24 de diciembre y eran de varios tipos, según se los he visto hacer a mi madre.
Turrón de guirlache: Miel a punto de caramelo y nueces o almendras. A veces de mezclaban las dos, aunque era más frecuente de nueces.
Frutilla en sartén: Se prepara una mezcla de huevo, harina y gaseosa de papelitos y se bate muy bien. Con un tenedor se va echando en porciones pequeñas como si fuesen copos a una sartén con aceite bien caliente, como el que hace palomitas de maíz. Todos esos trozos fritos se mezclan con miel a punto de caramelo y se hace una pasta plana, resultando un turroncillo muy nutritivo.
Turrón de cañamones: Se mezclan cañamones y miel a punto de caramelo. Era frecuente cuando se sembraba cáñamo para hacer cuerdas. Actualmente siguen dando cañamones en la fiesta del Masegar o de San Antoniete.
Alajú: Pan rallado, ralladura de limón y miel a punto de caramelo. Se formaban tortas con obleas. El de Ademuz es exquisito. Es un postre de origen árabe.
Hacían otras variedades de turrón con frutas pero era menos frecuente.
[1] Con este título apareció parte de este trabajo en el Boletín de la Casa de Cuenca en Barcelona nº 245, Época II , año XLIV Noviembre –diciembre 2006 Págs. 28-30.
[2] Fueron recogidas el 7-12 –73 a Dª Bienvenida Marín ( 48 años ), Dª Visitación Rodilla ( 67 años ) y D. Mariano Yuste ( 66años ). Los tres han vivido en Salvacañete y nacieron allí excepto Visitación Rodilla que era de Veguillas de Sierra (Teruel). La antigüedad de las canciones en el momento que las recogí era de más de 100 años. Se cantan con acompañamiento de guitarras, laudes, bandurrias, almireces, botella de anís, zambomba y crótalos o platillos.
Las celebraciones navideñas en las antiguas Tierras de Moya eran muy parecidas a las de Salvacañete. Misas , adoración del nacimiento y pedida de” aguilandos “ de casa en casa acompañados de almireces, zambombas hechas en casa con la butifarra del cerdo y los más jóvenes con guitarras, bandurrias, platillos , una botella de anís y algún pequeño acordeón. En Salvacañete los jóvenes y los casados los pedían después de la misa del gallo y los chicos la mañana de Navidad. Les daban nueces, manzanas, turrones, embutidos, etc. Los turrones se hacían en casa con nueces, miel y huevo. Los famosos “melaos” “frutilla en sartén” hechos con huevo y miel. Las madrepilas regalaban a sus ahijadas “coronillas” hechas de masa de pan, los famosos rollos de pico sobaos. Por esta época, finales de noviembre y diciembre se hacía el “matagorrino” que era también una fiesta, incluso en las aldeas y rentos se hacía baile con algún músico local. Las fiestas de despedidas de quintos también eran importantes.
Para la festividad de los Santos Inocentes se gastaban bromas y Fuentelespino de Moya tenía una tradición muy arraigada la de la Cofradía de Animas o “animeros”. Siete eran las familias que por tradición se transmitían de padres a hijos el cargo de animero. Esta cofradía solo la formaban hombres y uno era el presidente y otro el tesorero. Los animeros iban vestidos con vistosos gorros en cuyo frente lucían una calavera con dos tibias cruzadas y en la punta una borla multicolor. La tarde del 27 de diciembre iban recorriendo las calles y plazas del pueblo acompañados por el redoble de un tambor y unas seguidillas intercaladas en monótono estribillo que repetían mucho para avisar de su presencia. El dinero recogido era utilizado para sufragar los gastos de la novena por las ánimas, las misas necesarias por las almas de los familiares de animeros, para las velas y para el ornato de la capilla de las ánimas. si les sobraba lo utilizaban para arreglar hornacinas que había por el pueblo con un sentido religioso.
Las cofradías de ánimas fueron frecuentes en casi todos los pueblos de la Serranía Media y Baja de Cuenca en lo que fueron las antiguas Tierras de Moya. Las imágenes corresponden a los animeros de Fuentelespino de Moya que salían a pedir para las ánimas del Purgatorio el día 27 de diciembre por la tarde. En otros lugares lo hacían para Carnaval y en otros para todos los santos. Están tomadas del libro :” Fuentelespino de Moya,. Cosas y gentes de un pueblo doblemente centenario” de JOSÉ BENEDICTO SACRISTÁN y JOSÉ VICENTE PÉREZ DE LA SIERRA. Excma. Diputación Provincial. Cuenca 1998. Serie histórica nº 25. Muchas gracias.
Nuestras fiestas y tradiciones y los trabajos del campo son parte de nuestro folclore característico influenciado por nuestra situación de frontera entre Castilla, Aragón y Valencia
BIBLIOGRAFÍA
LOPEZ MARÍN MARIANO: "Folklore de Salvacañete" Edic. Excmo Ayto. de Salvacañete.2000
" Etnología y costumbres populares de Salvacañete" Ediciones Rodeno y colaboración Excmo. ayuntamiento de Salvacañete.Cullera 2016.
(C) MARIANO LOPEZ MARÍN